Presentación

Bitácora Robinsoniana pretende constituirse en un espacio para la construcción e intercambio de conocimientos propiciando la reflexión crítica en un marco de acercamiento dialógico para aprovechar las bondades de las tecnologías de la información y la comunicación, en este caso, aplicadas a la educación.En este recorrido todos estamos llamados a convertirnos en auténticos voceros del proceso de cambios que se generan continuamente en el contexto educativo, por lo cual los invitamos a participar activamente en este encuentro virtual, lleno de expectativas y situaciones gratificantes para el talento creativo. Juntos nos encargaremos de ir tejiendo una tupida red de saberes con la visión de establecer la necesaria congruencia entre teoría y práctica. Así que...¡ Bienvenidos a este estimulante intercambio!

Decálogo Robinsoniano


Nuestro equipo de trabajo estima la conveniencia de reflexionar en torno a las ideas y condiciones fundamentales que representan la clave para asumir el intercambio de conocimientos en cualquier contexto. Éstas son:

1) El conocimiento, mientras mayores oportunidades tenga para compartirse, más se incrementa.
2) El conocimiento no se transfiere, se construye y se comparte.
3) Todas las personas que visitan este blog poseen conocimientos, vivencias y
experiencias significativas relacionadas con los temas objeto de estudio, por lo cual sus aportes serán altamente valorados .
4) La diversidad de experiencias, opiniones y vivencias deben ser respetadas para
fomentar el intercambio en un clima de libertad y espontaneidad.
5) De este permanente intercambio, todos aprenderemos. Existe plena conciencia de que el aporte de los demás transformará el conocimiento con el que iniciamos esta Bitácora Robinsoniana; asimismo, reconocemos que el conocimiento que aportemos a los demás enriquecerá su caudal cognitivo y experiencial.
6) Estamos seguros de que el tiempo es uno de los recursos más limitados debido a nuestros múltiples quehaceres, no obstante, el tiempo asignado a nuestra participación es una regla muy importante para propiciar y mantener vivo el intercambio.
7) Más que expertos, todos somos animadores en este recorrido donde nunca estará de más una palabra de aliento, una retroalimentación oportuna y adecuada para reconocer el esfuerzo e incentivar la producción de nuevos conocimientos.
8) Nuestro compromiso con el logro de la excelencia será el principal motor que impulsará la autogestión del aprendizaje.
9) Estamos claros que más que competitivos seremos participativos, pues de aquí dependerá la calidad y cantidad de nuestra comunicación.
10) Por lo tanto, nos acogemos al principio expuesto por la Programación Neurolingüística (PNL) : “El fracaso no existe”; sólo fallan a veces nuestras estrategias al perseguir un objetivo...de allí que en este espacio sólo resta desearnos ¡ÉXITO!

La Universidad Simón Rodríguez y el Ideario del Maestro



Cada 28 de Octubre nos recuerda el natalicio del gran Maestro Don Simón Rodríguez. Imposible dejar de rememorar en estos días los aspectos básicos de su biografía tan matizada de imprecisiones como de pasajes conmovedores que nos llevan a constatar las contradicciones de la vida: un pensador eminente, un visionario con ideas educativas transformadoras y sin embargo, sumergido en la pobreza, y victima de la retórica de quienes no tuvieron la capacidad ni la sensibilidad de entender su proyecto educativo.
Pero Samuel Robinson ha trascendido todas las barreras que impone el tiempo; por ello en la actualidad sus ideas cobran fuerza y vigencia en la esperanza de quienes aspiran y trabajan en función de lograr cambios reales en la educación.
El ideario de Don Simón Rodríguez se nutre y fortalece en la universidad que orgullosamente lleva su nombre, excelente epónimo para el Alma Mater fundada sobre la base de una filosofía andragógica cuyos principios básicos son la horizontalidad y la participación. Esto se traduce en la praxis como una relación dialógica transparente y empática entre facilitador-participante, construyéndose así el escenario propicio para la planificación consensuada, la autogestión del aprendizaje y, por ende, para la investigación.
Los proyectos comunitarios son una clara expresión de que la Universidad materializa en el “hacer” los preceptos del “deber ser” y consolida la conciencia social del participante a través de acciones que responden a necesidades reales de las comunidades.Es un reto muy importante para la universidad Simón Rodríguez, y particularmente, para el Núcleo San Juan de los Morros continuar trabajando por mantener los principios que le dieron origen y por ser voceros inquebrantables de las ideas de ese viajero incansable, ductor eterno, soñador inquieto, incomprendido a veces y sobre todo gran maestro como lo fue Don Simón Rodríguez. Su recurso humano es una de sus grandes fortalezas que permitirá avanzar armónicamente e impulsar, definitivamente el desarrollo de la docencia, investigación y extensión en esta casa de estudio.